Se le llama oro verde por alguna razón. Independientemente de que te parezca exagerada la devoción popular que se le tiene a esta fruta (porque sí, es una fruta y no una verdura, por raro que parezca), lo cierto es que probablemente sea el bien de consumo alimentario más snob de los últimos tiempos. Entre amantes de la comida sana anti-bollería y niños de bien que se creen demasiado guays como para almorzar una tortilla francesa, no parece que vaya a pasar de moda pronto.
En Tattoox no somos muy pijos pero sí nos gusta el aguacate. De hecho, escribimos esta entrada con una tostada en mano. Con huevo revuelto incluido.
Dejando de lado sus propiedades alimentarias y su sabor, lo que seguramente sea más curioso de este dios vegetal es cómo se ha convertido en un icono estético. La infinidad de llaveros, tazas, velas y agendas que ha creado Mr. Wonderful a costa de él son prueba de ello.
Además, también ha conquistado el mundo kawaii. ¿Qué puede ser mejor que un aguacate bien verde y sonrojado con los ojos muy, muy grandes? Honestamente nada de nada. Nutritivo y *muy* cute :3
Si el aguacate es tu comida favorita pero no te acaba de convencer su tono verde natural, no desesperes: el blackwork nunca te fallará. Atemporal como una buena gabardina, la tinta negra es ideal si lo que quieres es no cansarte nunca de tu tatuaje.
Considera el minimalismo si eres amante de la línea fina y de los trazos limpios. Queda especialmente bien en tattoos pequeños, y como no se parece tanto a la fruta de verdad no te entrará hambre cada vez que lo mires. Si te lo paras a pensar, es razón más que válida para elegir esta opción. Imagina tener que entrar a un supermercado cada vez que mires tu tatuaje y te entre mono de una tostada de aguacate y salmón ahumado… simplemente insostenible.
Ah, el impulso humano irrefrenable de plasmar en tinta el amor por tu pareja… adorablemente peligroso. Y muy valiente. Una muy buena opción para liarla parda pero no mucho es elegir un símbolo que, en caso que la relación se acaba truncando (aquí apostamos por vosotros… ánimo), pueda perdurar en tu piel sin que te duela mucho mirarlo.
El aguacate partido por la mitad, con su gran hueso visible en un lado y en el otro no, puede servir perfectamente como declaración: ambas mitades están incompletas hasta que la una se encaja en la otra, formando así el fruto entero. Ah, qué romántico… ¿Cuándo llegará nuestro turno?
La palabra aguacate proviene del idioma náhuatl y se traduce literalmente como “testículo”. Como lo oyes. Hay órganos reproductores masculinos en todas partes, incluso en la comida. Si no te lo crees, te dejamos otra prueba en nuestra entrada de tatuajes de orquídea. En este caso al menos la forma es parecida. ?
Teóricamente, sus poderes curativos son su mayor cualidad y también la única metáfora que le hemos podido encontrar (no todo es tan profundo, es literalmente un fruto). Te lo puedes tatuar como amuleto o simplemente para reflejar que te gusta ayudar a los demás y eres un tipo de fiar. Y si no, pues oye, porque te gusta el guacamole y ya está. Solo tenemos una vida y si te hace feliz llevar un aguacate en el brazo pues que así sea. Si necesitabas una señal para lanzarte aquí la tienes.
fuente de imágenes: pinterest
Si el aguacate es tu comida favorita pero no te acaba de convencer su tono verde natural, no desesperes: el blackwork nunca te fallará. Atemporal como una buena gabardina, la tinta negra es ideal si lo que quieres es no cansarte nunca de tu tatuaje.
Considera el minimalismo si eres amante de la línea fina y de los trazos limpios. Queda especialmente bien en tattoos pequeños, y como no se parece tanto a la fruta de verdad no te entrará hambre cada vez que lo mires. Si te lo paras a pensar, es razón más que válida para elegir esta opción. Imagina tener que entrar a un supermercado cada vez que mires tu tatuaje y te entre mono de una tostada de aguacate y salmón ahumado… simplemente insostenible.
Ah, el impulso humano irrefrenable de plasmar en tinta el amor por tu pareja… adorablemente peligroso. Y muy valiente. Una muy buena opción para liarla parda pero no mucho es elegir un símbolo que, en caso que la relación se acaba truncando (aquí apostamos por vosotros… ánimo), pueda perdurar en tu piel sin que te duela mucho mirarlo.
El aguacate partido por la mitad, con su gran hueso visible en un lado y en el otro no, puede servir perfectamente como declaración: ambas mitades están incompletas hasta que la una se encaja en la otra, formando así el fruto entero. Ah, qué romántico… ¿Cuándo llegará nuestro turno?
La palabra aguacate proviene del idioma náhuatl y se traduce literalmente como “testículo”. Como lo oyes. Hay órganos reproductores masculinos en todas partes, incluso en la comida. Si no te lo crees, te dejamos otra prueba en nuestra entrada de tatuajes de orquídea. En este caso al menos la forma es parecida. ?
Teóricamente, sus poderes curativos son su mayor cualidad y también la única metáfora que le hemos podido encontrar (no todo es tan profundo, es literalmente un fruto). Te lo puedes tatuar como amuleto o simplemente para reflejar que te gusta ayudar a los demás y eres un tipo de fiar. Y si no, pues oye, porque te gusta el guacamole y ya está. Solo tenemos una vida y si te hace feliz llevar un aguacate en el brazo pues que así sea. Si necesitabas una señal para lanzarte aquí la tienes.
fuente de imágenes: pinterest